Inauguran planta para desarrollar productos innovadores a partir de quinua y alforfón

Esta nueva planta es parte del proyecto Polo Territorial de Desarrollo Estratégico de Ingredientes Funcionales y Aditivos, a partir de Granos Ancestrales, impulsado por la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) y que forma parte de la hoja de ruta del Programa Transforma Alimentos, financiado por Corfo y presidido por el Ministerio de Agricultura.
En este lugar se van a desarrollar productos con alto valor agregado, en base a quinua y alforfón, en la Sede Chillán de la Universidad de Concepción. Se espera que la construcción de 100 m2 atienda a pequeños agricultores de esta región.
La infraestructura, ya operativa, implicó una inversión pública superior a los $114 millones y cuenta con líneas completas para quinua y alforfón, desde limpieza hasta secado y desarrollo de productos en polvo, contribuyendo así con pequeños agricultores y empresarios en el prototipaje de alimentos más sofisticados.
“En este Polo, ejecutado por Orafti y la Universidad de Concepción y que cuenta con la colaboración de otras 11 entidades, confluyen asociaciones campesinas y de pequeños productores entre Rancagua y Temuco, que no tienen dónde producir y esta planta cumple ese objetivo, dado que es pequeña y de bajos costos. La idea es que con esto salgan al mercado con un producto ya elaborado”, expresó el subdirector del FIA, Rodolfo Campos.
Gran oportunidad para Chile
Peter Guhl, director del Polo de Granos Ancestrales y gerente agronómico de BENEO Orafti, destacó que su apuesta está en la integración de procesos, es decir, no vender granos, sino harinas, texturizados, etc. Advirtió, además, que el país debe trabajar en la composición genética de los granos, dado que “hoy día existe una sola variedad en Chile oficialmente inscrita y para poder penetrar en un mercado mundial, necesitamos más variedades y ojalá´, con diferentes propiedades”.
Pese a que la quinua chilena tiene más proteínas que la peruana y boliviana, su grano es más pequeño, lo que se traduce en una desventaja en relación a las ventas, dado que el consumidor prefiere uno más grande. Sin embargo, Guhl enfatiza que “Chile tiene la gran oportunidad de ser, en un plazo de tres años, el tercer productor más grande del mundo de quinua y el país que dé la mejor calidad comprobable de ella. Nuestro gran distintivo con Perú y Bolivia es hacer un cultivo trazable, asegurando calidad”.
Graciela Urrutia, gerente de Transforma Alimentos, por su parte, valoró la puesta en marcha de la planta. “Estamos gratamente sorprendidos con el avance que ha tenido este Polo, sobre todo, porque ha creado y desarrollado infraestructura de servicios, que es una de las áreas débiles que tenemos como industria de alimentos en Chile. Precisamente, la industria de los ingredientes se perfila como una con gran potencial, en base a la diversidad de materias primas que tiene Chile, pero falta valor agregado, desarrollo de productos y conexión ciencia-empresa, por lo que esta iniciativa es clave”, recalcó.
Según Carlos Avilés, gerente general del Polo de Granos Ancestrales, esperan atender entre 7 y 10 productores y/o emprendedores al mes, considerando a un productor promedio con 1 a 2 hectáreas de quínoa, con rendimientos de 1000kg /ha y procesamiento de 500 a 700 kg por día.
Actualmente, esta infraestructura está gestionando la obtención de resolución sanitaria, a través del brazo articulado de la planta piloto de procesamiento de la Universidad de Concepción, Campus Chillán, la cual sí tiene.