I+D e innovación en Chile bajo la mirada de la OCDE
Se deben reducir las desigualdades y mejorar la productividad
Chile ha mejorado sus marcos de políticas en los últimos años, pero el gasto en I+D e innovación —sobre todo por parte del sector empresarial— sigue siendo muy bajo, según indica un informe de la OCDEpresentado por su Secretario General, Angel Gurría.
El análisis del organismo precisa que Chile necesita actuar en otros frentes para liberar el pleno potencial de innovación de su economía. Esto se puede conseguir mejorando los beneficios fiscales de la inversión en I+D, flexibilizando la entrada y salida de las empresas, mejorando la colaboración entre la industria y la comunidad científica, potenciando programas que promuevan la innovación y mejorando la institucionalidad.
“El reto más importante hacia adelante es continuar profundizando el crecimiento incluyente para reducir las desigualdades y mejorar la productividad”, señaló Gurría. “Alcanzar estos objetivos se ha vuelto más difícil por la coyuntura económica actual, pero el gobierno está embarcado en la senda adecuada de reformas”, precisó.
POTENCIAR UNA MAYOR INVERSIÓN PRIVADA EN I+D
Para potenciar la participación privada en la inversión en I+D, se implementó en 2008 un beneficio fiscal inicial dirigido al gasto en I+D. En 2012, se modificó este beneficio fiscal para que las actividades de I+D desarrolladas internamente también pudieran beneficiarse. Otros cambios importantes que se han efectuado a la ley incluyen el hecho de que se ha multiplicado por tres el techo tributario anual para este beneficio, hasta USD 1,2 millones, al tiempo que se levanta el tope del 15% como proporción de los ingresos brutos. Tras esta modificación, el número de nuevos solicitantes se ha multiplicado por cinco. El programa existente sigue siendo más relevante para las entidades de mayor tamaño, dado que el crédito solo se puede amortizar contra beneficios. La evidencia del trabajo de la OCDE sobre las nuevas fuentes de crecimiento (Andrews y Criscuolo, 2013) sugiere que los créditos reembolsables pueden ayudar a las empresas dinámicas de menor tamaño, incluidas las de reciente creación que aún no generen beneficios económicos para poder beneficiarse de los créditos no reembolsables. Con el tiempo,Chile debería realizar un seguimiento cercano de la aplicación de este esquema y considerar la adopción de créditos reembolsables para complementar el esquema revisado recientemente. Para aumentar los incentivos entre las entidades de mayor tamaño en el futuro, podría añadirse al esquema actual un elemento incremental que ofrezca incentivos adicionales (OCDE, 2013a).
MEJORAR EL ENTORNO PARA EL EMPRENDIMIENTO
El informe destaca que el gobierno ha anunciado recientemente sus planes de ampliar el programa Start-Up Chile, aumentando los fondos en un 47% y facilitando el acceso de las PYMEs al crédito a través de BancoEstado. En 2014 se aprobó una nueva ley de quiebras que aborda un antiguo problema que provoca que los procedimientos durasen con frecuencia hasta cinco años, en comparación con el promedio de los países de la OCDE que suele ser menos de medio año. Esta nueva ley es un paso importante para la mejora del dinamismo empresarial. La mejora de estas políticas de salida debería optimizar la reasignación de recursos y, al reducir la incertidumbre, estimularía tanto la creación de empresas nuevas como el financiamiento. Pero Chile también debe mejorar el acceso al capital por parte de los emprendedores, por ejemplo simplificando los requisitos para que los fondos extranjeros de capital de riesgo puedan operar a nivel local.
ABORDAR LA ESCASEZ DE INVESTIGADORES CUALIFICADOS
El capital humano parece constituir otro obstáculo para conseguir mejoras de la productividad en las empresas chilenas. Las actividades de innovación e I+D dependen en gran medida de los trabajadores debidamente capacitados, especialmente aquellos con calificaciones de postgrado, y Chile sigue careciendo de la cantidad necesaria de capital humano avanzado en ámbitos clave de los campos STEM (ciencia, tecnología y administración de ingeniería).
Para abordar estos problemas, la OCDE indica que las autoridades deberían ampliar las ayudas económicas proporcionadas por el gobierno a los grados avanzados que tengan un contenido significativo en ámbitos tecnológicos, y para facilitar la integración de los graduados en el sector empresarial. Esta medida sería especialmente relevante para el programa Becas Chile dado que menos de la mitad de los estudiantes de doctorado que se benefician de dicho programa pertenecen a los campos STEM.
AMPLIAR PROGRAMAS QUE PROMUEVAN LA INNOVACIÓN CON MAYOR ÉXITO
Chile cuenta con varios programas bien diseñados que promueven la innovación, que tratan de abordar la tradicional separación entre el entorno empresarial y el universitario del sistema de innovación de Chile. Sin embargo, ni la escala de los programas ni la acogida de los mismos han sido suficientemente importantes como para conseguir un impacto significativo. De hecho, menos del 1% de las empresas del sector formal han solicitado y recibido ayudas de estos programas.
Según la OCDE, para impulsar la acogida de los programas y garantizar que sean costo- eficientes, las autoridades deberían dotarlos de un diseño que permita que puedan ser evaluados adecuadamente. En base a la revisión periódica de los mismos, aquellos programas cuyos resultados hayan sido positivos deberían ampliarse, proporcionándoles un mayor grado de estabilidad en sus políticas, mientras que aquellos programas cuyos resultados sean ineficientes deberían cerrarse o revisarse.
El informe precisa que la Agenda de Productividad, Innovación y Crecimientoconstituye un paso muy importante para abordar la fragmentada configuración institucional para la innovación. Asimismo, precisa que se están destinando nuevos esfuerzos a los denominados Programas Estratégicos que promueven la coordinación entre el sector público y privado y que podrían contribuir a la creación de clústeres. De hecho, puede ser conveniente establecer una mayor concentración de las ayudas en áreas que complementen las ventajas naturales de Chile de una forma que enfatice la cooperación entre la industria y la ciencia.
Las medidas deberían tratar de profundizar en las ventajas comparativas, y aplicando un especial cuidado para evitar que se creen oportunidades que generen comportamientos de captación de rentas, mediante un involucramiento sólido y continuado por parte del sector privado.
PRINCIPALES RECOMENDACIONES DE LA OCDE
- Reforzar la elaboración de políticas de innovación mediante el despliegue completo de la Agenda de Productividad, facilitando los vínculos entre la industria y la investigación, y promoviendo la coordinación público-privada para explotar los activos naturales, contribuyendo a complementar las ventajas comparativas.
- Revisar con regularidad los programas de innovación, cerrando o ajustando los programas ineficientes y ampliando aquellos cuya eficacia haya quedado demostrada.
- Con el paso del tiempo, proporcionar créditos fiscales reembolsables para I+D a las entidades de menor tamaño, de forma que las empresas recién creadas, jóvenes e innovadoras puedan beneficiarse más fácilmente de dichos créditos. Considerar la incorporación de un elemento incremental al esquema que aumente las ventajas a medida que se incrementen las inversiones.
- Ampliar las ayudas económicas para grados universitarios avanzados relacionados con los campos STEM, especialmente en el marco del programa Becas Chile.
- Impulsar aún más el acceso de los emprendedores a las redes globales y al capital de riesgo, lo cual incluye la simplificación de los requisitos para que los fondos extranjeros de capital de riesgo operen en el ámbito local.